Six Senses Laamu

Fuimos de babymoon sin hijos. Impresionante. Un 10. Llegas en hidroavion. El reef paradisiaco. Que maravilla poder hacer snorkel y ver los corales a 1,5m de profundidad a solo 50 metros de la villa. Y poder ver tortugas, rayas y tiburones sin necesidad de hacer submarinismo. Todo desde tu villa. De hecho, cada dia hacen salidas de snorkel con un biologo marino apasionado que te explica TODO. La villa sobre el agua es otro nivel. Nueva, de diseño cuidado pero conservando el estilo de maldivas. A mi que me encanta el diseño, me maravillo. Atencion a los detalles, como por ejemplo, tanto en la bañera como el vater hay una claraboya por donde ver el mar y los pececitos. Hasta ir al baño es ir una experiencia. En vez de mirar el movil, por la claraboya veras rayas, peces y un cangrejo. El placer que es dormir sin ruido de ciudad, sin sirenas, sin bocinas, y solo el sonido de las olas, es inexplicable. Es pura desconexion. Ahi si que descansas 100%. La comida espectacular. Teniendo en cuenta wue estas en una isla a 1h de avioneta de male, es mejor que el 95% de restaurantes de Barcelona. Mucho merito y muy disfrutado. Tanto el desayuno super variado, como todos los restaurantes. Ademas, te “animan” a ir descalzo por la isla y en los restaurantes. El lujo que es no tener que disfrazarte para ir a cenar, y simplemente ir comodo, en camiseta y descalzo es otro nivel. 0 dresscode. Le llaman barefoot luxury. Y cuando llegas, te asignan una bicicleta rollo verano azul, con una maderita con tus iniciales, para que te muevas por la isla. Y para que veas el nivel de detalle, como vas descalzo, te ponen unas almohaditas en los pedales para que no te hagas daño. Vuelve a ser niño. Y si eres amante de los helados, estas de suerte. Tienen una heladeria con, mas fe 50 sabores diferentes: sorbetes, veganos y normales. Y estan incluidos. El personal de servicio, en especial nuestro GEM Pablo, fueron acogedores, super atentos, cariñosos, amables y serviciales. Nos hicieron sentir como en casa. Pablo era el responsable de que nuestra experiencia fuera de 10. Cuando vas de vacaciones no quieres pensar en nada. Solo disfrutar. Esa era la mision de Pablo. Si queríamos reservar un masaje facial o el surf o un restaurante, le mandabas un whatsapp y él se encargaba de todo. Asi como recordartelo a diario. Tuvimos la gran suerte de ver la eclosion de los huevos de tortugas. Verlas correr hacia el agua fue un momento mágico. Y qué decir del surf y los coaches. Hice 2 dias. Tiene como 7-8 spots de surf para todos los niveles. Te imaginas estar en un spot, solo, sin nadie que te robe las olas. En medio del oceano, rollo documental de youtube. Con tantas olas como quieras. El unico limite es tu resistencia fisica. Y que las olas rompan perfectamente para que surfees unos largos segundos. Y que en la espera entre ola y ola, puedas ver atunes saltandl o tortugas sacando la cabecita para respirar. Y que el coach, te indique exactamente donde ubicarte, qué ola coger, y cua