Hostal Jardin Secreto

Un sitio maravilloso. Recomendable por su ubicación, el gusto en la decoración, la comodidad de las camas, la belleza de los sitios comunes y por supuesto por el trato exquisito. Lo aconsejo son ninguna duda. Me ha enamorado y volveré pronto 🥰

El alojamiento está muy bien ubicado, limpio, acogedor, habitación cómoda y limpia, con el espacio suficiente para pasar 3 noches, cerca de todo y la propietaria Eneida, nos dió muchas localizaciones para visitar y sitios para comer, si volvemos a Santander, repetiremos

L'accueil par Eneida est chaleureux. Le lieu est charmant et donne sur un petit jardin, inattendu au cœur de la ville. Décoration de bon goût de la chambre(spacieuse) et du''lobby''. Excellente literie. Calme. Nous reviendrons... Gracias Eneida...

La estancia en el jardin secreto fue genial desde el primer momento: la habitación y baño muy amplios y luminosos con una decoración muy acogedora, la calefacción funciona genial. La posibilidad de tomarte un café en su jardín en una de sus mesas, el detalle de las botellas de agua en la habitación, los distintos tipos de almohadas, la cafetera y hervidor de agua para tomar café o infusión cuando te apetezca y sobretodo la atención de Eneida muy atenta y acogedora. En definitiva, un sitio para volver.

Mi pareja y yo fuimos a pasar un fin de semana a Santander y si algún día volvemos, sin duda repetiríamos en el Jardín Secreto. Está muy bien situado en el centro. Las habitaciones son muy bonitas y el baño cuenta con todo lo necesario. Además, tienen la amabilidad de dejarte algún regalito en la habitación, como una botellita de agua, que se agradece mucho. Por otro lado, el jardín es ideal para pasar un rato tranquilo en alguna hora muerta de tu viaje a Santander. La única pega fue que la habitación que teníamos estaba a pie de calle, y se sentía poca intimidad. Aún así, a pesar de estar a pie de calle no era nada ruidosa, así que muy bien en ese sentido. Sin duda lo mejor fue la atención de la recepcionista/regente del hostal. Nos recibió con mucha amabilidad y nos explicó qué ver, dónde comer etc en la ciudad tomándose su tiempo para que nos quedase todo claro. Gracias a ello pudimos aprovechar al máximo nuestra estancia en Santander.

Una agradable estancia que repetiremos sin dudas, no se puede pedir más. Desde nuestra llegada todo perfecto tanto en el trato personal como en lo bien que nos han hecho sentir. Una habitación preciosa de 10 con todas las comodidades a nuestro alcance además de excelente ubicación.