Hotel Lido

Una estancia inmejorable. Tanto la vista de la habitación como el trato del personal gracias Pelayo, Kira, Dulce y Aitana. La comida buena y nos sentimos muy bien atendidos . No dudariamos en volver a este hotel que a pesar de tener que subir una cuesta para acudir a el es poca inconveniencia de verdad.

No es el mejor hotel donde he estado pero tampoco es el peor. Es verdad que está un poco anticuado y dejado, hay muchos problemas de humedad en las paredes. La limpieza podría ser un poco mejor, cambiaban las toallas todos los días pero las sábanas en una semana que estuvimos no las cambiaron. Nosotros cogimos una habitación cuadrúple ya que ibamos con dos niños y de espacio era muy reducida,con las maletas casi no nos podíamos ni mover. No era una habitación cómoda, son dos camas grandes y no había ni una silla para poder dejar la ropa. Teníamos balcón y unas vistas muy buenas y eso salvó un poco la opinión de hotel. Para acceder a la habitación había que bajar un montón de escaleras ya que el ascensor no bajaba hasta abajo y fue un poco incómodo bajar con las maletas. No lo recomiendo para personas de movilidad reducida o con carrito de niño. En el baño estaba todo muy viejo y tampoco era cómodo. El comedor en cambio sí nos gustó,el personal muy amable. Fuimos con pensión completa y la comida aunque no había mucha variedad estaba rica. Siempre había algún frito para los niños y dos carnes y un pescado, además de ensaladas. En las comidas unos días paella y otros fideua y estaba muy rica (además de otras cosas). Bastante variedad de frutas y yogures, además de varios postres dulces diarios. La cuesta para llegar al hotel se hace un poco pesada. Y otro inconveniente que encontramos fue el parking, es muy dificil aparcar por los alrededores ya que o es zona azul o es zona de residentes. Está el parking de la playa cerca pero cuesta 16 euros diarios. Comentar también que el hotel está cerca de la playa, pero no del centro. Hay una parada de autobús cercana pero no lo recomiendo ya que los autobuses son muy lentos, tardas un montón en llegar al centro. La próxima vez que vuelva a Benidorm me gustaría probar otras opciones.

El hotel no esta reformado, no tiene terrazas y no se puede tender ni una toalla y las habitaciones q no dan al mar son oscuras y ruidosa pero los colchones son geniales. La comida poca variedad y regular y el personal q nos sirve tiene q estar a la vez en la cafeteria ..subiendo y bajando continuamente, ellos son agradables en especial la camarera keli. La cuesta para subir al hotel es imposible y más para personas mayores q van del IMSERSO..Lo mejor las vistas desde la cafeteria y el restaurante...son espectaculares ..pero yo no volveria prque no es accesible aunque esta a pocos metros de la playa..

El hotel no era muy bueno tampoco era tan malo el personal del hotel encantador sobre todo dulce la chica que trabaja en éll restaurante en cuanto huéspedes fatal habían unos gitanos y no paraban de chillar maleducados se quedaban en la piscina era para ellos solos

Il panorama eccezionale, la disponibilità e gentilezza dei dipendenti fanno passare in secondo piano alcune problematiche che abbiamo potito riscontrare durante il soggiorno. Parcheggio inesistente ma si supera, colazione senza lattosio chiesta più volte ma non ho mai avuto opzioni varie, ho dovuto accontentarmi dei soliti biscotti per una settimana. Se avessi scelto la colazione salata non avrei avuto problemi ma per me la colazione è rigorosamente dolce. Comunque nel complesso bene.