Can Mascort Eco Hotel

Hotel ubicado en el centro de Palafrugell, a su alrededor es zona peatonal y mayoritariamente zona azul. Por lo que puede ser difícil aparcar según la hora o por la contra, hay opciones de parking de pago. Está muy bien ubicado, si quieres disfrutar de unos días por la costa brava visitando las calas de la zona (todas están a 15-25 minutos) y tienes supermercados muy cercanos. El hotel es muy acogedor y familiar. Te facilitan información vía WhatsApp antes de hacer el check in y una vez llegas de las opciones de turismo de la zona. Tiene un salón con zona de descanso y acceso a bebidas por si en algún momento quieres quedarte allí y no salir. La habitación es bonita y cuidada. La limpieza un 10. Te dejan agua y toallas limpias a diario. Tiene un caldarium que puedes disfrutar durante 1h por 25€ pp. La verdad es que está genial para relajarse un rato. El desayuno es de menú cerrado. A diario te dan a escoger entre un zumo de fruta (según la fruta que tienen) y un yogur y/o compota con granola casera. Escoges también un plato caliente (tipo tostada/bocata), la verdad es que están buenos, son sin gluten y de calidad. Y además tienen cafetera y varias opciones de repostería para complementarlo (que puedes coger libremente). Repetiría la experiencia, estuvimos muy bien.

Una vecchia casa patronale trasformata in hotel. Ben curati gli spazi Sono stata nei tre giorni di Pasqua e sinceramente il prezzo che ho pagato non vale l’esperienza: 688,00 per 3 notti con colazione. La junior suite è di buone dimensioni, ma il bagno talmente piccolo che per chiudere la porta da dentro non c’era spazio. Manca il Kit di benvenuto con spazzolino, dentifricio, crema corpo, pettine, ciabatte. Non c’è il televisore. Buona la colazione con prodotti eco. Purtroppo manca il servizio ristorante o quantomeno un bar per poter cenare con cucina rapida. Il parcheggio visto che l’hotel si trova in una zona pedonale dovrebbe essere incluso nel prezzo. La cittadina senza lode e senza infamia, però un buon punto di partenza per visitare la costa.

Bonito descubrimiento lo de este hotel. Tenia unas expectativas por las reseñas y las han cumplido y con nota. Ambiente cálido, se respira paz y tranquiladad justo lo que buscaba. Personal super amable y agradable. Las habitaciones amplias y silenciosas. No tienen tele lo que da mas tranquilidad. La piscina de agua caliente relajación total y poderla reservar privada es genial. Desayuno saludable y buenísimo. Volveria sin dudar.

Celebramos nuestro aniversario de boda y no puedo ser mejor que Lourdes y Alfred hicieron que fuese inolvidable . Recibimiento, calidez y buen gusto se mezclan en este pequeño hotel que hace que te sientas unico. Estancias compartidas como el salon de lectura con piano o el comedor de desayunos situado junto a la antigua farmacia ahora tienda y cafetería convierten este pequeño hotel en un plus donde el diseño no riñe con la intimidad y el saber hacer . Felicito a los anfitriones pues pocas veces te sientes como en casa sin estar en casa . Volveremos