Ona Don Juan

Well the buffett, varied, there was no gel day, only shampoo and body milk and at night unbearable, the kids running, screaming, slamming doors, doing what they wanted and nobody told them anything, the good location, near the beach

La entrada en recepción ya fue caótica,apenas te explican mucho, no les da tiempo por la cantidad de clientes que llegamos a la misma hora. Las habitaciones pésimas,nos tocó la zona que da al parking,estaba todo viejo y deteriorado. Yo le pondría cero estrellas. Nada de seguridad, las habitaciones se comunican por los balcones

No logré ver 4 estrellas por ningún lado, lo que sí vi eran pelos que por supuesto no eran míos en el colchón (adjunto imágenes) . El baño tenia cortina (antihigiénico) en lugar de mampara. El buffet una locura, la mayoría de las veces teníamos que esperar 20 minutos por falta de cubiertos, Para hacer el check in tuvimos que esperar 45 minutos y no te daban la llave hasta las 15:00. El dormitorio muy avejentado.

Las 4 estrellas han debido implosionar. Por servicios ofrecidos, siendo generosos, 1 estrella se ajusta a su calidad hotelera. Erámos 4 ancianos en un viaje del IMSERSO, nos dieron dos habitaciones en un pasillo ocupado fundamentalmente por grupos de adolescentes que por la noche practicaban deportes de interior, carreras por el pasillo, golpes en las puertas y gritos en diversas lenguas. Las habitaciones, nada que ver con las fotos mostradas en la web del hotel, eran viejas, sucias y feas, las paredes con humedades y sucísimas, el mobiliario arcaico y deteriorado, el baño viejísimo e incómodo. El personal apático, nada implicado con la organización, el cuidado de las instalaciones y el bienestar del cliente, se olvidaron, incluso, hacernos las habitaciones un día. Solo recomendable para grupos de adolescentes que viajan para festejar.

Horrible ! Fuyez !usine à touristes . Chambres sales pleines de poussières , lampes de chevets deglinguees salle de bains degueulasses , une odeur de moisie , j ai tué une grosse araignée, le l ai laissé par terre , et elle est restée là jusqu’à la fin du séjour , pourtant elle était visible mais les femmes de ménage n ont ni balayé ni lavé le sol . Le lavabo était tout gras pas nettoyé. Le restaurant une horreur , tellement de monde , et très peu de personnel , très antipathique, les buffets sont sales et personne pour nettoyer, il n y a plus de couverts dans les bacs , et si vous demander au personnel , ils s en foutent totalement, toujours lés mêmes plats, certains sont immangeables, le pain sans protection tout le monde touche et tripote pour choisir son morceau, bonjour les microbes ! L hôtel est très bruyant , à minuit c est la fiesta dans les étages , les gens crient et s amusent sans penser à ceux qui dorment et l hôtel ne donne aucunes consignes aux clients à ce sujet . Le personnel de la réception très antipathique, il ne faut rien leur demander car vous les emmerdez. Pour attraper l ascenseur il faut être chanceux, sinon vous montez à pied , ce n est pas grave si vous êtes au premier mais si vous êtes au 6 eme bonjour . Et en plus un ascenseur en panne , dans un hôtel aussi bondé, et pas de société d astreinte pour venir réparer ! Bon courage à ceux qui iront . Pour ma part c est la dernière fois que je met le pied dans cet hôtel minable !!! Il doit y en avoir qu un qui est content c est le patron il se gave . Une honte

Este hotel deja mucho que desear. No hay ningún tipo de organización. Poder llegar a coger las tarjetas de las habitación e instalarnos resultó una labor estrepitosa. Además de que el primer día tuvimos que esperar más de 45 minutos para entrar a cenar, añadiendo la nefasta organización del buffet: pocos trabjadores, no habia cubiertos... Hubo días que tuvimos que esperar más de 20 minutos para poder conseguir cubiertos, y aún así no fueron suficientes. Por la noches se hacía imposible dormir hasta altas horas de la madrugada, debido a los chillidos, ruidos, golpes, etc. que se escuchaban. Por último recalcar que la recepción hacía copias de tarjetas de habitaciones sin ningún tipo de controlor; es decir, podría haber pedido la habitación que quisiese sin necesidad de presentar ningún tipo de documento para cepcionarse de que fuera la que se hospedaba en esa habitación.