Viva Dominicus Palace by Wyndham, A Trademark All Inclusive

J’ai mangé au restaurant de l’hôtel Polito de Coco j’ai adoré l’entrée des 3 mini humbergur sont succulents avec à la fin un Mamajiuna merci l’hôtesse très accueillante Belinda et José Armando et aussi. le restaurant de fruits de mer avec un site enchanteur ( pour seulement windham palace) je le recommande .le seul petit hip c’est l’internet qui est intermittent merci en janvier 2022

Se nota que es 4 estrellas, partiendo por la administración deficiente de un gerente de operaciones con cero empatía hacia los huéspedes, el señor nordine bahraoui. Pésimo ser humano a cargo de las relaciones publicas. Tuvimos problemas de ruidos molestos durante al menos 3 días de nuestra estancia, con reparaciones a las habitaciones contiguas a las nuestras. Ni una solución. Habitaciones con vista al mar, a las que no llegaba el internet, siendo que prometieron internet gratis en todo el complejo. Este no funcionaba dentro de los restaurantes, en las habitaciones, en la playa. Todo lo contrario a los hoteles 5 estrellas que nos hemos hospedado en otras oportunidades. La idea de visitar este hotel fue porque, en mi caso fue la primera vez que fui a República Dominicana, hace 12 años y quería revivir la linda experiencia, esta vez con familia y amigos. Pero resulto un entero desastre. Nos intoxicamos 3 de los 8 del grupo en el restaurante Palito de Coco. La comida era bastante precaria y mal preparada, y con esto terminamos en la clinica del hotel al día siguiente. Vómitos y diarreas fueron las consecuencias de la cena de esa noche en el restaurante Dominicano. Luego en el restaurante IL PALCO, nuestra reservación fue 21.45 y claramente es la peor hora para ir, ya que no había nada de lo que ofrecía el menu y decidieron de forma unilateral, servirnos lo que les quedaba disponible. Nos tomaron el pedido pero no les importo, ya que venían con platos que no correspondían a lo pedido. Y se hacían los locos hasta que los paramos y llamamos al señor Huascar Santan, a cargo del restaurante y no hallaba que explicarnos, solo pedía disculpas. Finalmente no terminamos de cenar ahi y nos fuimos. La comida muy basica, como la de un restaurante de baja categoría. Nos intentaron vender una membresía de 20.000 dolares, y a cambio nos ofrecieron, ponernos una pulsera amarilla, que corresponde a los socios con beneficios VIP y accesos exclusivos a distintas áreas del hotel. En la charla del “desayuno VIP” que no fue tal, ya que teniamos acceso al restaurante sin ser VIP, nos dieron varias informaciones y luego al momento de cerrar, el gerente del lugar nos ignoró durante más de 2 horas. Luego de esto decidimos irnos y nadie dijo nada, ni disculpas ni accesos ni pulsera ni nada. En definitiva y tal como lo dijo textual el gerente de operaciones Nordine bahraoui, no les interesa resolver nada, porque de igual manera siguen vendiendo y no les importa si opinamos bien o mal, en el fondo son solo números para el y seguro que para los dueños también. Una pesima experiencia que jamás repetiré en este hotel. Con el fin de vender, te ofrecen todo y no cumplen nada, es decir, una estafa. Y el señor Bahraoui, para contrarrestar toda la mala experiencia ocuerrida lo único que se digno entregar os una botella de wisky y con eso solucionar todo para el, un completo desastre!!!.