Souto Guest House

El alojamiento es impresionante tanto el hotel en si con sus vistas como la ubicación. Todo limpísimo e impecable. Sencillo pero todo al detalle. El servicio es realmente ¡Increíble! Se adelantan a cuidar de todos los detalles, los cuales son muchos, imaginables incluso antes de que a uno le dé tiempo a pensarlos. Super serviciales. Nada más entrar, ya os recibe Liliana y José propietarios con una amplia sonrisa, el servicio encantador y súper profesional. Te dan todo tipo de recomendaciones locales inmejorables. Dispones de todo lo necesario y más en la habitación, todo cuidado al detalle, con mimo y muchísimo gusto. A mayores del café que te ofrecen en la habitación dispones de un espacio con mesas para desayunar. Todo de diez, porque no existe mas puntuación, así da gusto viajar, volveré sin duda a tener una estancia en Souto Guest House.

La habitación está muy bien, moderna y limpia. Las camas son suficientemente cómodas. El baño también es moderno y está muy limpio. La atención es fenomenal, dando facilidades e indicaciones de que ver, dónde aparcar, etc. De cortesía, agua y café Nespresso en la habitación y riquísimos bizcochos en una sala común del primer piso. La ubicación es perfecta en Braga y, pese a estar en el bullicioso centro, no se oye ni un ruido. La única pega es que no hay ascensor y hay que subir unas duras escaleras hasta llegar.